Los Beat ’em up, "los de peleas", los de "yo y mi colega contra los punkis y moteros"...
El mejor género y el más adorado de la historia de los videojuegos. Era el género que más monedas tragaba y disponía de numerosos títulos que se reconocían con facilidad al entrar a un salón o bar, ya que formaban las colas más largas y kilométricas de viciados. ¿Por qué nos gustaban tanto? La chulería y carisma de los personajes y enemigos, la cantidad de movimientos que podían realizar (puñetazos, patadas, llaves, cabezazos, codazos...), coger cubos de basura y bates con el fin de curtirle el lomo a todo pringui que se cruce en tu camino. Como las polillas a las velas, este maldito y endiabladamente divertido género atraía a la chavalería con ganas de repartir soplamocos y así satisfacer sus instintos asesinos.
Aparte de soltar hostias, el escenario urbano, extraño y friki donde se desarrollaban estos juegos también era parte de su atractivo. Que recuerde ahora mismo:
- - Encontrar deliciosos platos como chuletas de cerdo, pollos al ast, ensaladillas con trufas, langostas a la remanguillé, alitas de faisán, etc. Todas estas comidas se podían encontrar generalmente en cubos de basura o cabinas de teléfono; todas éllas perfectamente servidas, con cubiertos y de rechupete. Directas a la barra de vida del protagonista. De hecho, en todo el mobiliario urbano se podían encontrar otros elementos, como bolsas llenitas de talegos, joyas, jarrones Ming...
- - Los papanatas que pueblan estos juegos: "El que no tiene derecho a vivir", un suicida que con un par de hostias lo desmenuzabas. El gordo, que al morir solía soltar de sus pantalones todo un manjar a las fines herbes. Las tías del látigo, difíciles de atizar pero podías cogerlas del pelo y lanzarlas por los aires. El yonki con cara de pillao que solía asomar la cabeza por la esquina derecha del monitor, como diciendo "¿y yo qué leches hago aquí?" Y muchos más: el gigantón mini-jefe que aparece rompiendo una pared y con ganas de romperte a ti la cabeza, el odioso que se esconde fuera de la pantalla para evitar que le infles, el grupete que te viene por delante y por detrás para acorralarte, el saltimbanqui, el escupefuego, etc.
- -"El nivel del ascensor". Un escenario común en todo estos juegos en el cual el jugador debía subirse a un ascensor que comenzaba a subir o bajar a toda mecha, y los enemigos aterrizaban en él con ganas de partirnos la cara y tal. Caían desde cientos de metros de altura sin romperse ni un mísero huesito del oído (y lo curioso es que luego con 2 patadas te los merendabas)...
- - Si en nuestro mundo tener novia supone en ocasiones complicarnos la vida cosa fina, en el de estos juegos la cosa es exagerada. ¡Vaya!, que aquí si tienes novia, prepárate para luchar contra organizaciones terroristas y cientos de pandilleros, que te la secuestran. Putos celosos...
En fín, que parecía que los hacían todos con molde y la clonación era evidente. En estos tiempos actuales, con tantas ínfulas videojueguiles, supondría pegarles cuatro tiros a sus desarrolladores. Pero en aquella época no nos preocupaban esas tonterías, tan solo importaba apalizar a punkies pixelados y recuperar novias. Benditos tiempos.
Aunque este género está muerto (aunque los actuales Devil My Cry o God of War tienen ingredientes del Beat ´em up, no lo son en definitiva ni mucho menos. Tienen altas dosis de exploración y aventura y no tienen lo que hacía grande a este género: el modo 2/3/4 jugadores). Gracias al bendito Mame, podemos volver a disfrutar como cerdos de estas joyitas que tanto nos engancharon de pequeños (volver a jugarlos de mayor es una experiencia verdaderamente emocionante y nostálgica, en serio). Así que, para hacer este rascacielos más alto todavía, escribiré un Top Ten de mis Beat ´em up favoritos favoritísimos. Estos juegos son, a mi juicio, Las Diez Maravillas Lúdicas y recreativas que se han legado a la humanidad. Algunas -y de enorme calidad- se han quedado fuera (como Moonwaker, The Punisher o The legend Of Silkroad), es lo que tiene la selección natural:
10- Final Fight (1989):
Este fue el juego que sentó la mayoría de las bases que han definido el Beat ´em up, exceptuando el recurrente de hostiar a macarras que ya lo hizo Renegade en el 86. Pero bueno, incorporó la barra de vida enemiga, los items de puntos y vida, ataques especiales y potentes pero que restan vida, etc. Como en todos, cada final de fase tenía su propio bicharraco que costaba la de Dios matar, por lo general había que echar varias monedas de cinco duros para conseguirlo. De entre ellos, el más significativo era Andore, especie de André el Gigante ciclado, que te traía más de cuatro quebraderos de cabeza.
Haggar era el alma del juego,salvar a su hija y reventar yonkis eran sus mayores hobbies.
9- Golden Axe (1990):
No sólo los salones recreativos recibieron su colección de hostias, también los usuarios de consolas domésticas pudieron sentir los moratones. ¡Y este juego de la Mega Drive era la caña!
Matar orcos, lanzar hechizos, pisar para robarles jodidas botellitas de maná y destruir a un caballero negro, que había raptado a una princesa porque le picaba el culo un rato. El juego transcurría en una tierra al estilo de Conan, e introdujo auténticas genialidades: magias, monturas (dragones, pollos gigantes y cosas así), el modo Duel (en el que nos vienen hordas de enemigos cada vez mayores y complicadas) y la mejor de todas, ¡¡El Enano!!! Qué grande era ese personaje. xDD
8- Alien vs. Predator (1994):
Una intro de lujo, legiones de enemigos en pantalla, tantos movimientos por personaje que parece un juego de lucha one-on-one, personajes completamente diferenciados y todos geniales, escenas de película, ambiente... Si acaso le pondría como pero, que no tenía mucha variedad de enemigos, ya que eran todo aliens.
Por cierto, recuerdo que la máquina siempre estaba ocupada, cagüen sos...
7- The King of Dragons (1991):
Con posibilidad de subir el nivel de nuestras habilidades, escenario de juego atractivo con tanta magia y tanta hostia, repleto de criaturas fantásticas, como orcos, magos, elfos, etc. Vamos, que el juego molaba mil, y con amigos diez mil. Siempre había hostias de todos colores para ver quien de los tres jugadores se pillaba al elfo, obviamente porque era él el que, pese a tener el arma menos dañina, atacaba a mayor distancia; y te permitía cual cagueti, el quedarte en la retaguardia tirando flechitas y saetas, mientras tus amigos se partían la cara contra los orcos en primera línea. Así amortizabas los cinco duros y durabas algo más en la partida.
6- The Simpsons: The Arcade Game (1991):
Jugar con Bart y pegar patinazos, coger y lanzar adornos de la pantalla con Homer, todo era genial y podían jugar cuatro. Eso sí, si eran tres o cuatro siempre habían broncas para no pillar a Marge y Lisa, que luego al chaval lo tildaban de nenaz. Y para aquellos que se hayan enviciado a este juego tanto como yo, recordarles el bonus de inflar el globo de Krusty, que yo desde entonces no tengo huella dactilar. xDDDDD
5- Battletoads (1991):
El cenit gráfico de la NES. Aunque en un principio salió como plagio del Teenage Mutant Ninja Turtles Arcade (y superó a su objetivo), poco importaban sapos o tortugas si con él te lo pasabas la hostia de bien. Este juegazo de leches protagonizado por unas ranas anabolizadas con una fuerza burra, mezclaba fases de peleas de calidad (con enemigos como cerdos punkis y ratas luchadoras de sumo) con fases de conducción de motos o tablas de surf. Lo mejor sin duda las técnicas de combate de las ranas, insuperables xDDDDDD. Qué jartá de reir...
Pero eso sí, el juego mas "hijodeputa" que me he echado a la cara, dificilísimo, ¡buahhhh! Recuerdo que en mi barrio había un niño que se lo había pasado y era una puta leyenda viva, como el primero que mostró el final de Zangief
en Street Fighter II (sí, el personaje que nadie se pillaba xD).
4- Sunset Riders (1991):
Juego amo amo. Cuando jugué, la máquina del juego estaba como si se la hubieran follado a lo bestia (pena que daba la pobre). Había que pulsar con una fuerza equivalente a 500kg de presión para que funcionase, pero menuda orgía de balazos y estampidas bovinas.
3- Street of Rage 2 (1992):
Otro grandioso Beat ´em up de las consolas, y de los mejores juegos que han pasado por mi querida Mega Drive. Una estetica muy cuidada, variedad de tipejos a los que explotar a puñetazos, una duración bastante superior a lo acostumbrado a su género, pero lo mejor: su banda sonora. Era...bueno, dejaré aquí un ejemplo:
El jugador que no haya tocado este juego en la Mega Drive no merece las teclas del mando que chafa en estos tiempos.
2- Dungeon & Dragons: Shadow of Mystara (1996):
Un juego todopoderoso, que además estaba por delante de los demás en los tiempos que entonces corrían. Siempre lo jugaba cuando iba con mis padres (en verano) a comer a un bar que había en la Playa de Santa Pola, y juro que al ver ahora esta imagen me ha venido el olor a paella de aquel bar.
Control excelente, experiencia extremadamente divertida e intensa, clases variadas para todos los gustos, etc. Su único defecto es que el odioso se terminaba demasiado pronto y te dejaba con ganas de más (vamos, como casi todos los de este género).
1- Cadillacs and Dinosaurs (1992):
La joya del Krone. Este glorioso juego, basado en el comic Xenozoic Tales de Schultz, sí que fue un auténtico juego robavidas, y no el WOW ese.
No puedo ni pensar en la cantidad de horas que me dejé con este juego... Madre mía, si ese tiempo me contase en la cotización llevaría diez años jubilado ya. Mi primo y yo lo llegamos a controlar hasta el exceso, con la gracia que los cinco duros nos cundían una barbaridad. El dueño del bar cada x tiempo llamaba al técnico que le metía un puntito más de dificultad con el switch. Cuando volvíamos a jugar, en un par de partidas le volvíamos a coger el truco y dejaba en nada el intento del pobre desgraciado de hacer el trasto algo más rentable.
Click para ampliar.
El mejor Beat ´em up de la historia, una joyaza que seguro, a millones de personas, hizo su infancia feliz y ludópata.
1 comentarios:
Cadillacs and Dinosaurs :S
Este juego era la polla XDDD En mi pueblo había varios locales con él, recuerdo que si uno estaba lleno, habría otro vacío. En un principio se chupaba los cinco duros en nada, pero en cuanto pillabas el truco... ERA LA HOSTIA XDDD Sobre todo cargarte a los dinosaurios o pillar los vehículos. Eso sí, creo que nunca lo acabé :f
Street of Rage 2, Golden Axe... estos los jugaba en casa de un amigo o cuando visitaba a mi prima. Creo que el último año que la visité (hace tres o cuatro), sacó su Segata y jugamos unas horas demostrando lo malo que soy jugando en equipo -y lo QUE MOLA ESE ENANO- :p
Lo más molón de estos juegos es que si eras un joputa podías ajostiar a tus compañeros sin compasión. Recuerdo cuando le arreaba más de una vez a uno y luego me daba la del pulpo para al final tomar revenganza :o
Del resto creo reconocer este: Sunset Riders ... y si no es sería otro de vaqueros donde lo pasaba pipa *.*
Por acabar debo decir que yo era más del Doble Dragon XDDD No sé si era el II o el III, pero lo tenía un vicio de la hostia, y con niveles de agilidad que me cagaban en sus muelas. El que más me molaban era un forzudo que me recordaba a Chuacheneguer, creo que lo llamaba así, y unos ninjas joputas. Si, los gráficos comparados con tus maravillas eran una birria... pero era MI JUEGO, MI VICIO XDD
Publicar un comentario
Pero recuerda: la combinación de dos o más letras puede llegar a tener cualquier tipo de significado. Vigila lo que escribes.